Este
estilo, se caracteriza por el uso de colores de la naturaleza, rojos,
amarillos, verdes, grises y marrones. Como su origen hace referencia al campo
principalmente, los materiales que
se utilizan a parte de la madera,
incluye las fibras naturales, barro, pizarra, piedras, hierro, bronce o forja
para los objetos.
Por lo
general los muebles
rústicos artesanales son grandes
y pesados y pueden tener aspecto desgastado. Un mueble fundamental en una casa rustica es una gran mesa para el comedor, sillas y una mesa de centro que incluso las hay con
cajones, en el jardín puedes
incluir asientos de mimbre y bancos de madera.
Para decorar hay muchas posibilidades, como
cojines y cortinas con colores naturales,
objetos como tijeras de podar antiguas,
percheros y paragüeros, calderas, cazos o la argizaiola. Si tienes un local, los objetos de labranza, como aperos
y yugos son el complemento perfecto.
La iluminación,
no se olvida con, lámparas de forja colgante para el salón y apliques
para las paredes.
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